Dr. Arcenio Estévez Medina.
El consumo rutinario de calcio se ha
convertido en una moda que lejos de ayudar, está creando muchos problemas de
salud. Entre ellos trastornos del ritmo cardíaco, aumento de las posibilidades
de que se produzcan piedras en el riñón y hasta piedras en la vesícula biliar.
Se pretende que todas las mujeres de más
de 40 años consuman calcio, supuestamente para evitar la osteoporosis; pero no
se miden las consecuencias del uso de este mineral, el más abundante de nuestro
cuerpo y que no sólo es importante para la consistencia del hueso y del diente,
sino también para que haya una buena transmisión de los impulsos nerviosos y
para neutralizar la acidez que se produce en la sangre y que de no ser por la
acción de este mineral acabaría con el individuo.
Esta acidez puede ser provocada por el
consumo excesivo de proteína y grasa. Es
decir, por el abuso del consumo de leche, queso, mantequilla, carne, huevo, ya
que aportan muchos ácidos grasos y aminoácidos.
Estos a su vez aumentan la presencia de ácidos en la sangre y entonces
el calcio es desplazado de los huesos para ir a neutralizar la acidez,
provocando que baje este mineral. Por
esta razón el abuso del consumo de alimentos ricos en proteína, contrario a lo
que se cree, es un factor significativo en la producción de la osteoporosis.
Muchas veces es suficiente reducir la ingesta de proteína para detener un
proceso inicial de reducción de calcio en los huesos (osteopenia).
A veces no hay que tomar calcio para
evitar la osteoporosis, lo que hace falta es otro mineral como el magnesio, el
hierro, el fósforo. También puede faltar
alendronato sódico o vitamina D y la persona llevándose de una vecina o del
médico que siguiendo la moda o la rutina receta calcio u otros productos.
Muchas empresas vendedoras de calcio
patrocinan estudios masivos para determinar la densitometría ósea, que es un
buen método para saber la densidad de los huesos; pero no se debe seleccionar
cualquier hueso para hacerlo. En caso de
los huesos de la muñeca, no es un estudio confiable para determinar si hay
osteoporosis, sin embargo, la mayoría de las personas sometidas a ese procedimiento
salen con una receta de un calcio que vende la empresa que auspicia el estudio.
Lo correcto es que se haga una
densitometría del hueso conocido como fémur que es el más largo del cuerpo
humano y que además se realice un análisis del calcio en sangre para determinar
si el paciente necesita tomar este mineral o no. Si estas investigaciones nos reportan que la
persona necesita calcio empezamos el tratamiento. De lo contrario, los riesgos del consumo de
este mineral son mayores que los beneficios.
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